Assange y Anonymous: revuelta en el ciberespacio

Las descargas de información que ha caído sobre nosotros desde el ciberespacio como una deliciosa lluvia tropical están creando divisiones en ese territorio imaginario por el que a diario navegamos placidamente. Las huestes no han perdido tiempo en alinearse ante el sorpresivo desenmascaramiento masivo que causaron las revelaciones del bienaventurado Wikileaks; Uno a uno, y en espacio de horas, fueron cayendo los supuestos bastiones de la libre expresión e intercambio  en Internet, revelando sus patéticos rostros de infantes asustados ante la violenta presión de sus amos y señores.

No es una sorpresa que Mastercard y Visa abandonaran a Julian Assange, mientras este yacía en esa prisión inglesa, incomunicado del mundo, especulando sobre su futuro. A fin de cuentas son solo otra cobarde corporación mas, que no tiene problemas en prestarle sus servicios a toda clase de escoria mientras tengan bolsillos profundos, y no esta dispuesta a tomar una posición desfavorable a la producción del dinero bajo ninguna circunstancia. Pero fue una imagen cómica, emulando a una caos Marxiano a lo Duck Soup, como toda institución del mainstream abandonaba a Assangue, al punto que hasta su propio país busca desasociarse del célebre hacker. Ahora esta “libre”. Luego de jugar a las charadas legales en una corte abarrotada la fianza fue concedida por doscientos cuarenta mil dólares, por un crimen punible con una multa de mil dólares.

Estas traiciones nos revelan una cruda realidad, que existía en la imaginación de todos pero que solo ahora a llegado a materializarse en un atentado publico contra la libertad de expresión de todos, tomando forma en un único e insostenible proceso jurídico contra el cable transmisor.  El peligro de que Assange se mantenga bajo una acusación de cualquier tipo es la posible extradición de Inglaterra, país donde se entrego voluntariamente y en el cual se presume que el veredicto seria finalmente favorable para Assange, a Suiza donde las situaciones especificas del crimen fueron escalando progresivamente de el cómicamente nombrada falta de “Sexo por Sorpresa”, a  la de violación. Se especula también que Suiza podrían ceder a presión Estadounidense que busca acusarlo de espionaje y extraditarlo a sus tierras para nunca mas ser visto. 

La materialización de la traición no fue la única en hacerse presente de manera tempestuosa. Un pequeño grupo de hackers sin rostro a arremetido contra los gobiernos y las corporaciones en Internet, y a salido en defensa del fanáticamente asediado Assange. Este grupo se hace llamar Anonymous. Vienen funcionando desde el 2008, realizando esporádicos ataques a quienes consideren atentar contra la libertad de expresión y la integridad del ciberespacio. Ahora, han decidido alinearse como abstractos espartanos al frente de las filas de Assange. Anonymous es un avezado grupo de internautas y hackers, mayormente desorganizado y desperdigado, conocido por ser completamente anónimos (ningun miembro es identificable), y ataques a una disímil gama de objetivos; desde Gene Simmons de Kiss, por sus habituales reflexiones idiotas a favor de una vida materialista, hasta a la iglesia de Cinesiología por atentar contra la libertad de expresión y la razón.

Los miembros de Anonymous suelen portar mascaras
de Guy Fawkes cuando se hacen presentes en protestas

Ahora toda su energia esta enfocada en atacar a los enemigos de Wiikileaks. En las ultimas semanas, este grupo tomo represalias contra las organizaciones financieras que cerraron las cuentas de donaciones a Wikileaks; Visa, MasterCard, PayPal, y el Banco Suizo. Estas operaciones de hackeo rudimentario conocidas como “Ataques de negación de servicio” ejecutadas por hackers veteranos, así como por primerizos en los atentados virtuales, todos miembros de Anonymous, logro que las paginas de Visa y MasterCard se vinieran abajo el 8 de diciembre.

Esto sirvió como excusa para que el mismo diciembre 8, esos aparentes bastiones de libre expresión que son Facebook y Twitter, cerraran las cuentas de Anonymous. Mientas escribo estas líneas, me llega la noticia que Mark Zuckerberg, creador de Facebook, a sido escogido como La Persona del Año por la revista TIME, honor al cual Assange había sido escogido como el favorito para ganar por el publico internauta.  Creo que ahora sabemos  a que lado de la arena se colocarían las redes sociales mas concurridas llegado el caso de defender la libertad de expresión y los beneficios que el mainstream tiene para los que sigan sus mandatos.

Las acciones de ambos bandos vaticinan una corriente tumultuosa en el ciberespacio, inclusive llegando a augurar una guerra total que talvez no sea la primera guerra cibernética de la historia, pero es la primera de la cual el publico en general pudiera estar consiente. Las operaciones de Anonymous tienen una capacidad muy limitada, y su alcance es escaso en cuanto a un impacto real en las organizaciones que atacan, pero tienen un modelo interesante que sugiere una futuro prometedor para este tipo de operaciones y sirve como advertencia para los gobiernos, y otros encubridores naturales de la verdad de que no todos se quedaran de brazos cruzados.